¿Sabías que el gel de aloe es muy versátil?

El gel de aloe es una de las sustancias curativas naturales más disponibles, con muchos usos, desde curar heridas hasta descongestionar la piel. De hecho, se ha utilizado durante miles de años para efectos curativos y medicinales. Antiguamente, el gel de aloe era conocido como «el milagro de la naturaleza».

Muchos lo relacionan con una buena costumbre para los signos externos del envejecimiento, pero ¿sabías que el gel de aloe también se utiliza para tratar muchos otros problemas? En esta publicación, te diremos todo lo que necesitas saber sobre este gel y cómo se puede utilizar para mejorar la salud en general.

Beneficios de usar el gel de aloe

Uno de los usos más bien conocidos del gel de aloe es para tratar quemaduras solares. Su elevada concentración de antioxidantes, enzimas, vitaminas y aminoácidos lo hacen uno de los mejores remedios para tratar signos de envejecimiento y quemaduras leves. Esto es debido a que el gel es un muy buen hidratante y reduce la inflamación. Incluso, a muchas personas con piel sensible les ha atendido muy bien el gel de aloe, ya que es lo suficientemente liviano como para no irritar la piel.

Un estudio de 2014 mostró que el gel de aloe también puede tratar lesiones en la piel provocadas por ejercicios físicos. Esto se debió a que actúa como un antiinflamatorio y ayuda a reducir la inflamación. Esto también le permite a los atletas tratar las lesiones más rápidamente debido a la rápida curación y recuperación que ofrece el gel.

Pero además de tratar lesiones externas, el gel de aloe también puede ayudar a tratar problemas internos. Si sufres de gastritis crónica o úlceras, el gel de aloe podría ayudarte a aliviar los síntomas. Esto se debe a sus propiedades antiinflamatorias y curativas, las cuales ayudan a reducir la inflamación intestinal, lo que ayuda a aliviar la hinchazón y la incomodidad.

Otra cosa que también podés hacer con el gel de aloe es rejuvenecer la piel. Esto se debe a que los antioxidantes y la vitamina C contenidos en el gel ayudan a reducir los signos externos de envejecimiento. Esto incluye arrugas, líneas finas y flacidez. El gel también puede ser usado para tratar el acné, ya que ayuda a controlar la producción de aceite, lo cual previene el enrojecimiento y un en exceso de espinillas.

Cómo usar el gel de aloe

Debido a la variedad de usos del gel de aloe, hay muchas formas de usarlo. Para la mayoría de los tratamientos cutáneos, simplemente puedes aplicar el gel directamente a la zona afectada y masajearlo suavemente durante unos minutos. Esto ayudará a penetrar los nutrientes en tu piel y añadirá una capa de hidratación. Puedes hacer esto un par de veces al día o cuando notes que tu piel necesita un poco de hidratación extra.

También hay otras formas de aprovechar esta increíble sustancia. Puedes crear tónicos y mascarillas con el gel de aloe para dar a tu piel un impulso de hidratación o para tratar el acné. Para esto, todo lo que tienes que hacer es combinar una cucharada de gel de aloe con unas pocas gotas de aceite esencial (esta última es opcional) y mezclarlo bien. Luego, aplica la mezcla en tu piel y deja que se seque antes de enjuagar, aproximadamente 15 o 20 minutos.

También puedes agregar un poco de gel de aloe a tu rutina de cuidado de la piel para suavizar la apariencia de tu piel y añadir algo de hidratación. Puedes agregar unas cuantas gotas a tu humectante o sustituir la crema o el aceite por el gel de aloe. Para suavizar la apariencia de tus ojos, aplica una pequeña cantidad de gel de aloe alrededor de los ojos y deja que se seque antes de lavar.

Para tratar problemas internos, puedes tomar una cucharada de gel de aloe en jugo de frutas o tomar cápsulas de gel de aloe. El gel de aloe también es muy popular como un laxante natural y suplemento nutritivo. Lo único que necesitas es una cantidad moderada para evitar los efectos secundarios, como una inflamación estomacal o una diarrea excesiva.

Cuidado de la piel con gel de aloe

Hay muchas formas de incorporar el gel de aloe a tu rutina de cuidado de la piel, desde mascarillas hasta humectantes. Para obtener los mejores resultados, combínalo con otros ingredientes naturales para obtener un tratamiento más completo. Por ejemplo, para el tratamiento del acné, puedes mezclar el gel de aloe con una miel natural. La miel es un gran antiinflamatorio y ayuda a reducir la inflamación de la piel. También contiene muchos antioxidantes que pueden ayudar a suavizar la apariencia de la piel.

Otra cosa que también se puede hacer para mejorar la apariencia de tu piel es mezclar el gel con crema de coco. El aceite de coco es un gran hidratante para la piel y contiene muchos antioxidantes que ayudan a combatir los signos externos del envejecimiento. Meclando estos dos ingredientes naturales, obtendrás un potente tratamiento hidratante para la piel.

Conclusion

Como pudiste ver, el gel de aloe es una herramienta muy versátil y beneficiosa. Esta sustancia puede ser usada para tratar todo, desde quemaduras solares hasta lesiones en la piel provocadas por ejercicios. También puede ayudarte a regular la producción de aceite para el tratamiento del acné y a añadir una capa de hidratación extra a tu piel. El gel de aloe es un gran ingrediente para incorporar a tu rutina de cuidado de la piel. Así que, ¿por qué no empe